Artículos del día 12 de julio de 2007

Al asalto del Estado

Cada vez de manera más descarada, los separatistas catalanes van ganando posiciones en su tarea de destruir la nación y el Estado. Ellos dirigen y los españoles pagamos y desmantelamos nuestra patria milenaria. Miserables, miserables; nosotros más que ellos.
Esos mismos separatistas han convertido a la presidenta del Tribunal Constitucional en destinataria de sus mensajes y en cómplice de sus intrigas. Estamos ante una conjura que, si el Rey no lo remedia, llevará en poco tiempo a la destrucción de España.
A Pájaro bobo le sobrecoge la perfidia de los separatistas catalanes, aún más la indolencia y la falta de patriotismo de los españoles pero por encima de todo su propia pasividad: Ramón Ibero, cobarde y traidor.
Cuatro preguntas ingenuas e intempestivas
¿De qué sirve el Tribunal Constitucional si está en manos de los separatistas?
¿Es tarea del Tribunal Constitucional facilitar, legitimar y legalizar la destrucción de España como nación y Estado?
¿Cuándo tendrá lugar el asalto final de los separatistas a los restos de nuestra patria?
¿Qué puede y debe hacer en estas circunstancias un patriota español que no sea llorar y lamentarse de su destino?

Bono, reemplazado, desplazado y emplazado

A estas alturas es fácil ver que al comediante José Bono le salió mal el númerito de la dimisión. Su jefe y superior no fue a buscarle con lágrimas en los ojos; sus partidarios no pidieron/exigieron su vuelta inmediata con todos los honores. Desde entonces, el mancheguito ha estado merodeando/husmeando en torno a las instancias de poder político a la espera, búsqueda y/o captura de una propuesta enjundiosa o de un cargo de lo que sea y como sea pero con mando, sueldo y representación. Pájaro bobo se inclina a pensar que Zapatero le tenía reservado el de presidente del Congreso, que le está como a san Francisco de Asís un par de trabucos en las manos y con las manos en alto a la manera de Pancho Villa. Eran tan grandes los deseos del subalterno y tan vivas sus ansias de servir a España y los españoles que ha mordido cebo y anzuelo antes de que uno y otro se sumergieran en el agua. A Pájaro bobo le cuesta trabajo imaginar a José Bono en un cargo institucional que exige, entre otras cosas, rigor, seriedad y compostura y no le da margen para escenificar sus arengas pseudopatrióticas y demagógicas. Sinceramente, no le parece que ése sea, ni mucho menos, un destino correjto para él..
Pregunta ingenua e intempestiva: ¿lo ha hecho deliberadamente Zapatero para provocar el descredito de su compañero, correligionario, rival y enemigo personal y deshacerse de él por una temporada cuando no para siempre?