Pujol ben Gurión y Maragall ben Ariel, sumos sacerdotes del Sanedrín catalán
Montilla el golem, Tarradellas el proscrito
Las últimas manifestaciones y declaraciones políticas registradas en el Principado han puesto de manifiesto que aquí quienes mandan de puertas adentro son Pujol ben Gurión y Maragall ben Ariel, sumos sacerdotes del Sanedrín catalán. Montilla, en funciones de golem, se cuida de comprar medallas para ponérselas en el pecho cuando y como ellos le ordenen. Actos y fastos deben constar en los libros de historia. En cambio, en esos libros no deberá figurar bajo ningún pretexto el nombre de Josep Tarradellas, traidor de traidores. Curioso, puesto que sin su traición ahora no habría Generalidad y, como mucho, el Sanedrín seguiría sumido en el vacío de las entelequias histórico-políticas. Pero el Sanedrín existe y parece ser que, según sus miembros más destacados, ha llegado el momento de que lidere al pueblo elegido para armar la gran bronca y dar el salto definitivo. Hay quien habla de soberanía nacional y Estado, pero nadie menciona la guerra de los Segadores. Guerra es aquí palabra prohibida.
Pregunta ingenua e intempestiva: ¿existe en España algo parecido al Sanedrín catalán pero con poder y capacidad de decisión reales?