Galeuscat, coalición de separatistas
¿Tiene remedio el cerrilismo carpetovetón?
Después de años y años de discutir, forcejear y atacarse sin miramientos, el PP y el PSOE, los dos partidos de ámbito nacional, no sólo no han llegado a un acuerdo en cuestiones básicas que afectan a ellos y, lo que es mucho más importante, al conjunto de España y los españoles, sino que además con su cerrilismo han propiciado la unión de lo separatistas de tres de nuestros puntos cardinales. Galeuscat es un engendro y una una tristísima lección. Y una amenaza gravísima y, por gravísima, inaceptable. Su programa para el futuro que empieza tras las elecciones de marzo es aterrador. En definitiva, los periféricos pretenden poner a su servicio la estructura del Estado español antes de destruirla. Estamos ante la aniquilación de España financiada por los españoles y dirigida por los separatistas. Mientras tanto, ahí está Zapatero, delincuente habitual, con su sonrisa de alguien que no se entera. ¿O se entera y se alegra?
Pregunta ingenua e intempestiva: ¿No prohíbe la Constitución que los partidos separatistas formen coaliciones contra el Estado español y el conjunto de los españoles?