Espíritu democrático: democracia y patriotismo
Entiendo que el espíritu democrático cristaliza en una actitud intelectual –a la vez epistemológica y ética– de acuerdo con la cual todo lo que un ser humano piensa y expresa con palabras constituye una opinión.
En consecuencia, entiendo asimismo que una sociedad aceptablemente democrática es un universo de opiniones.
En el plano intelectual o cultural me tengo por demócrata en cuanto que estoy dispuesto a aceptar y a respetar todas las ideas con valor de opiniones personales.
Simultáneamente me considero un patriota español y como tal me niego a aceptar y a respetar un régimen político asentado sobre la destrucción de España, sea como punto de partida o como meta y punto de llegada, aun en el supuesto de que pueda haber un régimen político que sea realmente democrático partiendo de esa premisa.
Pero, ¿es en verdad posible que una comunidad humana constituida en nación y estado con siglos de historia y hoy dotada de un régimen mínimamente democrático decida llevar a cabo su propia destrucción y la lleve a cabo efectivamente?
¿Se extingue o se sublima la democracia en el patriotismo?