Artículos del día 7 de noviembre de 2014

Monago

Entiendo que Monago ha planteado mal su defensa ante la acusación de que ha sido objeto en los últimos días.

Por lo que sé, en España se juzgan hechos, no se juzga a personas.

Aunque fuera sólo por esa razón, lo que cuenta en este caso son los hechos y, por supuesto, las pruebas; pruebas de la acusación y pruebas de  la defensa.

Entiendo, pues, que los alegatos verbales en un sentido u otro carecen de valor jurídico y tienen como objeto ocultar la realidad -en definitiva, los hechos- y hacerla derivar hacia una logomaquia fraudulenta o, cuando menos, estéril.

Entiendo que Monago lo tiene muy fácil: presentar las facturas de sus viajes. Imagino que tanto él como la acusación pueden/deben solicitarlas a la compañía aérea.

En principio, mis simpatías son para Monago, pues creo que es «básicamente» honrado, además de un buen español  Y, como yo también soy extremeño, debo confesar que, efectivamente, la tierra  tira.