¿Un fenicio al frente de la Generalidad de Cataluña?
Entiendo que, desde hace unos meses, la política de Cataluña ha entrado claramente en una línea tan destructiva como previsible.
Línea mayoritaria en actividad pública y propagandística, dominada por los separatistas con sus incontables facciones o, si se quiere, traiciones.
Para no perderme en el laberinto infernal y, por lo tanto, eterno de sus enredos, yo los meto a todos en el mismo saco.
Con carácter preventivo por si acaso.
Dejo fuera de él a García Albiol, porque entiendo que en su caso no tengo que preocuparme de cosas tan desagradables como el juego de la puta i la Ramoneta y el fuego amigo.
En el saco meto y agolpo a todos esos sedicentes demócratas que incumplen reiteradamente las democráticas leyes de un Estado de derecho que juraron/prometieron cumplir y nunca cumplieron.
¿Qué pretenden?
Que conteste el fenicio Miquel Iceta, alguien capaz de engañar por igual a españoles y a catalanes, a separatistas y antiseparatistas, a burgueses y proletarios con tal de que unos y otros le nombren presidente de la Generalidad de Cataluña.
Naturalmente, al pobre siempre le ha tirado más la línea fenicia, que en mala lógica será la que se imponga, llegado el caso.