La catarsis vasca como modelo
Asisto atónito y sobrecogido al diálogo que mantienen ante sendas copas de vino Maixabel Lasa, viuda de Juan Mari Jauregui, asesinado por Eta, e Ibon Etxezarreta, uno de los autores del atentado criminal.
Zubiak (Puentes) se llama el documental que, dirigido por Jon Sistiaga y Alfonso Cortés-Cavanillas, narra, en torno a ese hecho nuclear, la vida de una sociedad vasca desgarrada por los enfrentamientos personales por espacio de más de cincuenta años.
Afortunadamente, a la postre se impone la cordura, unos y otros se avienen a tender puentes y se establece la paz sobre la base del olvido y el perdón. Un antiguo miembro de Eta confiesa que lo que más le ha impresionado ha sido la actitud libre de rencor y deseos de venganza de los familiares de sus víctimas. Según él, esa actitud ha hecho posible o, al menos, ha facilitado la reconciliación.
Pregunto
¿Cabe aplicar el modelo vasco de los Puentes al conjunto de España?
¿Cabe pensar en una catarsis sincera y generosa de la sociedad española?