¿Cuándo atacará Israel a Irán? ¿Resultado?
Podemos dar por sentado que, mientras pueda, Israel no va a permitir la existencia de un Irán equipado con armas nucleares. Y también que, a largo plazo, no podría impedirlo.
Por eso, cabe pensar que Israel se va a jugar la supervivencia tomando la iniciativa y actuando por su cuenta y riesgo, ¿sin contar con Estados Unidos?, antes de que se abata sobre su población la primera bomba atómica iraní.
Las fuerzas armadas israelíes disponen de menos de tres años para llevar a cabo su plan, pues se calcula que para el año 2012 los iraníes ya tendrán a punto armas nuleares con las que atacar a Israel y lo harán por sorpresa, sin aviso previo.
Desde el punto de vista judio, la acción preventiva tiene dos partes complementarias y, en cierto sentido, contrapuestas:
La primera parte consistirá en destruir los tres centros neurálgicos del programa iraní: Isfahan, donde se fabrican los combustibles; Natanz, donde se realiza el enriquecimiento de uranio, y Arak, donde está instalado el reactor de agua pesada. A estos tres objetivos habría que añadir todavía el complejo de Burshehr de gran importancia estratégica.
La destrucción de dichos objetivos se podría realizar mediante un triple raid aéreo de ejecución simultánea e incluso con misiles balísticos de alcance medio. La primera variante ofrece más posibilidades de éxito en cuanto a la destrucción de los objetivos pero también es más arriesgada, mientras que la segunda es a la vez menos arriesgada y menos precisa.
Israel no puede errar.
En cualquier caso, el problema más grave es determinar y sobre todo contrarrestar la capacidad de reacción de Irán, pues Israel sólo puede llevar a cabo el ataque si tiene la seguridad de que va a estar en condiciones de neutralizar el sistema de defensa y contraataque del enemigo.
Pregunta a los cuatro vientos: ¿es posible que Israel destruya a Irán e Irán a Israel, de modo que sólo haya vencidos, destruidos y aniquilados?