A vida o muerte
En un artículo publicado en La Vanguardia de hoy, viernes 3 de abril, sin nombre del autor o autores, se plantea un asunto de tan candente actualidad como éste:
«¿Deben decidir los médicos, en fases extremas, cuáles de sus pacientes sobrevivirán y cuáles no?»
Formulada la pregunta y planteado el debate, he aquí la respuesta que se nos ofrece a continuación en el mismo artículo:
«Es duro aceptarlo, pero debe priorizarse la atención a los enfermos con mejor expectativa vital.»
Mis objeciones son:
¿Se tienen debidamente en cuenta los derechos y las opiniones del enfermo y sus familiares en ese supuesto?
¿Se tienen debidamente en cuenta los derechos y las opiniones de los médicos implicados en cada caso concreto?
¿Se respetan debidamente las normas deontológicas de la profesión y el juramento hipocrático en todos los supuestos?
A mi juicio, el quid del asunto, debate incluido, es saber si se puede formular una norma universalmente válida a partir de la declaración:
Debe priorizarse la atención a los enfermos con mejor expectativa vital.
Con ello me remito al imperativo categórico de Kant.