De la nada al ser, del ser a la nada

Entiendo que, hasta ahora, el alumbramiento del ser a partir de la nada y la extinción del ser a través de la muerte y su vuelta a la nada han delimitado y delimitan el espacio de la única realidad-racionalidad integral  que, en forma de existencia, está a nuestro alcance.

                                                                       . . .

 

Entonces, la vejez compareció a mis pies, invadió mi cabeza y, después de desmontarla junto con todas o casi todas sus industrias, se instaló en ella. Ahora vivo en un estado de desconcierto próximo al caos, ¿anticipo del caos?

Me gustaría saber cuanto antes cómo y en qué va cristalizar ese estado de desconcierto.

A lo mejor me quedo definitivamente en el estado de desconcierto y, además de vivir en él, descubro, gracias a él, nuevas fuentes de inspiración.

Es posible que la vida en permanente desconcierto tenga también sus alicientes. Ya lo iré contando.

De momento, aquí estoy, observándome y observando las emisiones –ráfagas, destellos, luminiscencias– de mis nuevos visitantes y huéspedes.

¿Sufro? Pues, sí. Yo soy yo con mi cabeza y en mi cabeza. Sin mi cabeza y fuera de mi cabeza no soy yo, y ahora mi cabeza está invadida y ocupada por imágenes reflejo  que me atormentan y no me dejan vivir en paz.

Añadir comentario

Puedes usar los tags html <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong> . El nombre y el email son campos requeridos, el email no se publicará, solo es para controlar.