Presupuestos del Estado: los verás pero no los catarás

Pájaro bobo sostiene que, tan pronto como un negociador-interlocutor de Zapatero se sienta a la mesa de las promesas, ya está cazado. Hasta ahora, los únicos que se han salvado han sido los trabucaires etarras y, parcialmente, su emisario, el mongol Ibarretxe, que sigue por ahí con su mongólico referéndum.

En cambio, los separatistas catalanes sólo viven para maldecir/elogiar las maquiavélicas virtudes del ladino y leonino leonés. De momento, los ha engañado a todos, desde Pujol ben Gurión, venerable figura del Sanedrín o Consejo Asesor de Cataluña, hasta su fámulo y subalterno, el mínimo Mas. El último en caer en la red y pasar a engrosar la lista de timadores timados  ha sido el bolchevique Montilla. Ahí está ahora, frente a las murallas de la Constitución española, con su ariete de cartón piedra, sin saber qué hacer ni a dónde apuntar. Es lo que dice Pájaro bobo: ¿de qué te sirve el ariete si no te sirve?

Todo porque su antiguo valedor y siempre jefe le ha advertido, con amenaza incluida, que no se le ocurra poner el ojo en los Presupuestos del Estado. Y tiene que haber sido una amenaza  muy contundente y muy eficaz, pues el bolchevique ha obedecido sin rechistar, lo cual, claro está, no quiere decir que éste no vaya a tramar una de las suyas, como tampoco  quiere decir que su jefe no tenga preparada una respuesta de las suyas.

Pregunta ingenua e intempestiva: ¿quién le ha dicho a Pájaro bobo que Zapatero ha pedido a Corbacho que esté preparado para viajar a Barcelona, concretamente a la plaza de San Jaime, tan pronto como a Montilla le coja un percujo  y dé con sus huesos en un hospital de la Seguridad Social?

Idióticon de Pájaro bobo
Percujo: catarro, resfriado o malestar general de cierta gravedad. Dialecto de la Alta Extremadura.

Síntesis de una conjura frustrada

Primero formaron un frente con todos los partidos políticos de Cataluña, salvo alguna excepción, y, acto seguido,  apostaron el ariete  de la Financiación autonómica frente a las murallas del Estado de las Autonomías con intención de abrir en ellas una brecha  que permitiera a los sitiadores acceder a la plaza de la Constitución, ya intra muros, donde el caballo de Troya de Estatut esperaba órdenes y refuerzos para dar cuenta del Tribunal Constitucional e implantar el nuevo modelo de Estado. Putsch incruento y conjura en toda regla.

El plan estratégico había sido concebido por el Sanedrín o Consejo Asesor de Cataluña, pero las acciones tácticas corrían a cargo de José Montilla en su condición de presidente accidental de la Generalidad. Y en esas estaban, cuando…

Rodríguez Zapatero apareció en la pantalla de TV, arqueó las cejas, simuló una sonrisa, abrió los brazos y con voz sosegada e incluso sincera y convincente declaró, con estas o parecidas palabras,  que hasta el momento él había cumplido con el Estatuto de Cataluña, que la financiación autonómica era cosa de diecisiete, no de dos, y  que los Presupuestos del Estado  estaban a buen recaudo y, por lo tanto, nadie que no fuera él podía utilizarlos como arma balística (del griego bal.lo, arrojar). Dicho esto, desapareció, y volvió a reinar el silencio.

Tres preguntas ingenuas e intempestivas
1) Dónde queda el frente nacionalista dirigido por el Sanedrín o Consejo Asesor de Cataluña?
2) A dónde ha ido a parar el ariete de la Financiación autonómica manejado por Montilla?
3) Qué ha sido del caballo de Troya del Estatuto de Cataluña?

Fórmula Zapatero: economía, financiación autonómica, presupuestos del Estado

El Gobierno de Zapatero ha elaborado, por vía de urgencia y a modo de componenda o parche poroso, una serie de medidas para hacer frente y, en lo posible, frenar/paliar/contener el ruinoso curso de la economía nacional.

Nuestro jefe de Gobierno ha previsto la adopción, durante este año y el que viene, de veinticuatro medidas  económicas. Después de escuchar sus explicaciones al respecto, Pájaro bobo tiene la impresión de que el pobre aún no se han enterado de que, en momentos de crisis, hay que ayudar en primera instancia a las clases sociales que más sufren, pero a sabiendas de que eso no hace sino agravar el problema o, lo que es igual, aumentar el número de personas que viven del Estado. Si en otros tiempos sonaba a blasfemia capitalista, hoy puede afirmarse sin ambages que el subsidio de paro aumenta el paro.

En opinión de Pájaro bobo, eso significa que las medidas de ayuda urgente a los sectores más necesitados de la sociedad deben ir acompañadas necesariamente  de programas centrados en la dinamización de la economía productiva, empezando por las empresas, que son las que en verdad crean riqueza y generan puestos de trabajo. El sector productivo de la sociedad es el que financia la política social del Estado, no el Gobierno.

En el asunto de la financiación autonómica, el ladino leonés tiene muy claro que Cataluña debe entrar, como una de las diecisiete,  en el saco de las Autonomías y que sus gerifaltes, empezando por los miembros del Sanedrín o Consejo Asesor, deben renunciar a perpetuidad al sueño imposible de las relaciones bilaterales. Cataluña necesita más a España que España a Cataluña, de la misma manera que el PSC, con Montilla incluido, depende del PSOE, no viceversa.

Por lo tanto, ha venido a decir Zapatero, que los separatistas catalanes no amenacen con chantajes como la formación de frentes nacionales y el rechazo de los presupuestos del Estado para hacer caer al Gobierno socialista. Los que caerán, en ese supuesto, serán ellos, que además quedarán desenmascarados para siempre. El chantaje separatista se basa siempre en amagar y no dar. Eso lo saben  muy bien Bono, Guerra, Rodríguez Ibarra y, por supuesto, este pájaro bobo.

Resumiendo: de momento, Zapatero no tiene intención de renunciar a su política social, bautizada por el que suscribe con el nombre de votofactoría, mientras que los separatistas catalanes tendrán que empezar a maquinar una nueva argucia, estratagema, añagaza o gatuperio para ir avanzado en su camino hacia el precipicio.

Pregunta ingenua e intempestiva: ¿qué haría Zapatero sin los separatistas del Norte y del Este y que harían los separatistas del Norte y del Este sin Zapatero?

Economía y contabilidad

En su economía —administración de la casa—, Pájaro bobo utiliza un sistema de contabilidad que, depurado en el transcurso de los años, hoy consta de dos elementos básicos: la lista de movimientos (cargos y abonos) que le proporciona la entidad bancaria —léase Caja de Ahorros— y una hoja de control con los ingresos y los gastos diarios que él elabora y coteja periódicamente con los abonos y los cargos de la lista. A final de mes, la diferencia entre gastos e ingresos de la hoja de control  tiene que coincidir y de hecho coincide siempre con el último saldo de la lista de movimientos de la Caja. Como todo este trabajo lo realiza con el ordenador, es evidente que  Pájaro bobo se cuida de la administración de su casa desde casa.

Pregunta ingenua e intempestiva: ¿por qué, cuando trabajaba, Pájaro bobo a duras penas conseguía ahorrar unas pesetas y ahora, cuando no trabaja, puede hacerlo con holgura?

Moraleja. Disponer de una contabilidad diáfana y lo más simple  posible es una manera de ahorrar dinero y tiempo.

Ha muerto un amigo

Se llamaba Miguel Ángel Espinosa, tenía 49 años y era coordinador del Partido de los Ciudadanos (C’s) en Sabadell.  Persona activa, con las ideas claras y un claro sentido del orden, Miguel Ángel puso de manifiesto en su gestión y su actuación diaria  esas y otras cualidades, como, por ejemplo, una gran facilidad para las relaciones humanas y el trato directo con las personas. Como sólo le traté un par de meses, no puedo decir cómo pensaba realmente, pero sí acerté a ver en él un hombre que prefería abiertamente la acción constante y organizada a las teorizaciones y los debates ideológicos; por lo tanto, muy válido para la dirección política. Él no era creyente, yo sí lo soy. Por eso y porque nunca estará demás, le deseo de todo corazón la paz que ganó con su esfuerzo.

Crisis económica, financiación autonómica y Presupuestos del Estado: tres problemas y una fórmula, vacaciones

En manos de Zapatero las vacaciones son una de sus muchas maneras de dar largas a los asuntos que ha decidido no afrontar, que son todos o casi todos y, en cualquier caso, los más graves. En primera instancia, el tiempo juega siempre a favor suyo, porque él está resuelto, cínicamente resuelto a no cumplir sus compromisos o, lo que es igual, a no pagar lo que debe. Con él, lo prometido nunca es deuda. Y, también, las deudas de honor no se pagan.  Que le llame falso entre los falsos, y con razón,  un separatista catalán que ha hecho de la traición a España la razón de su vida es canela fina. Acaso un día se diga: «Eres más falso que Zapatero».  O también: «Era tan falso, tan falso, que ni lo separatistas querían tratos con él».

Montilla le aguantó los doce asaltos del combate, pero en la prórroga sucumbió. Eso es, al menos,  lo que ve y prevé Pájaro bobo para después de vacaciones. Como la crisis es y existe, se niegue o no se niegue, cabe pensar que seguirá galopando y cuando Zapatero  tenga que afrontar la financiación autonómica, porque haya agotado todas sus trapisondas, comparecerá  ante los buitres periféricos o enviará a su subalterno Solbes para que lo devoren. Lo seguro, o casi seguro, es que al final el tahúr de la eterna sonrisa encontrará una fórmula para salvar el pellejo y la máscara, aunque tenga que arrojar a las alimañas al único de los suyos que sabe y entiende algo de finanzas.

La vuelta de vacaciones será dura. Pájaro bobo percibe ya vientos con mensajes de dolor y tristeza. Zapatero se aferrará al poder y con él a su sonrisa. La sonrisa de un cínico, la sonrisa de un delincuente sin conciencia, sin escrúpulos de conciencia. Zapatero es la antítesis de lo ético.

Pregunta ingenua e intempestiva: ¿por qué Pájaro bobo se imagina siempre a Zapatero en una cárcel?

Ciénagas: del Estatut a la financiación, de la financiación al Estatut

A Pájaro bobo la última o penúltima añagaza urdida por los separatistas catalanes le recuerda, una vez más, aquella descabellada aventura del barón de Münchhausen, narrada por Rudolf Erich Raspe, en  la que el legendario soldado de fortuna germano, tras precipitarse en una ciénaga con su caballo, se empeñó en salir de ella, montura incluida, tirando con fuerza de su coleta.

Ahora, los separatistas catalanes, parapetados en un frente de cartón piedra con pretensiones pancatalanistas y, de paso, parlamentariamente representativo y democrático, tratan de sacar adelante su propuesta de financiación, basándose en el Estatut, para después exigir la aprobación y el cumplimiento del Estatut argumentando que ya ha sido aprobado y ha entrado en vigor el sistema de financiación contenido en el Estatut. ¿Verdad que no está mal la añagaza?

En opinión de este observador, José Montilla tiene y mantiene hasta ahora un récord envidiable: él es el único político cispirenaico que ha conseguido engañar a Zapatero por activa y por pasiva y el único, asimismo, al que el su(b)sodicho Zapatero aún no ha conseguido engañar ni una sola vez, que sepamos.

Pregunta ingenua e intempestiva: ¿cuánto tiempo conservará su récord el bolchevique Montilla, teniendo como tiene por delante las ciénagas de la financiación y el Estatut?

Frente catalanista: tramoya de cartón piedra

El que tiene el dinero es el que manda. Siempre fue así. Y, aquí y hora, el que tiene el dinero o la llave de la caja de caudales es Zapatero, analfabeto en economía y otras ciencias políticas, pero con perfidia suficiente para suplir con creces esas y otras carencias. Por eso tiene  a su lado al subalterno Pedro Solbes, al que todos o casi todos teníamos por una eminencia de la pasta gansa y sus secretos. De momento, en lo único en lo que viene dando la talla es en escamoteos con la marca de su jefe, «el presidente más falso de la historia de España», según Francesc Homs, uno de los más falsos y ruines representantes del frente catalanoseparatista. Todo un alarde. Y un farol de tahúr consumado.

Hace ya varios años, Pájaro bobo escribió un artículo titulado «Una conjura con nombre de Estatuto», en el que denunciaba la naturaleza  fraudulenta  y, por lo tanto, delictiva del llamado Estatuto de Cataluña. Quiso publicarlo en ABC, pero parece ser que, cuando estaba a punto de salir, alguien metió la mano y «levantó la página». Aun así, el autor del artículo ha persistido en su denuncia hasta el día de hoy, momento en el que parece ser que el mencionado Estatuto no va aprobarse. En opinión de Pájaro bobo, el veredicto o dictamen del Tribunal debería rezar más o menos: «Rechazado íntegra y totalmente como documento estatutario por este Tribunal Constitucional, que lo considera contrario, en su letra y en su espíritu, a la Constitución española de 1978 actualmente vigente en todo el territorio nacional, sometido, al igual que todas las instituciones del Estado, a la soberanía del pueblo español».

El frente catalanista —de hecho, obra de un partido único— es una escenificación de cartón piedra. Para intimidar, pues detrás no hay nada. Además, los separatistas saben que con el Partido Popular no conseguirán ni una pequeña parte de lo que pueden conseguir con Zapatero. Su gran ventaja consiste en que, hagan lo que hagan, nunca van a recibir golpes de castigo o represalia, y, mucho o poco, seguirán avanzando hacia esa forma de independencia de Cataluña asentada en la colonización de una España desnaturalizada y desintegrada. Lo consigan o no lo consigan, ellos están convencidos de que no tendrán castigo por su traición y su conjura. Francesc Homs tiene razón:  «Zapatero es el presidente más falso de la historia de España».

Parece ser que Zapatero quiere quitarse de encima la patata podrida del Estatuto catalán y que sea el Tribunal Constitucional el que cargue con ella, pero los separatistas catalanes se proponen utilizar al jefe de Gobierno como rehén por su condición de garante de dicho Estatuto.

En cualquier caso, Zapatero miente a los separatistas catalanes, ellos  saben que Zapatero les  miente, él sabe que ellos saben que les  miente  y, aun así, Zapatero les miente. ¿Por qué?

Pues porque Zapatero sabe que los separatistas catalanes le mienten y ellos saben que Zapatero sabe que ellos le mienten y, aun así, ellos le  mienten.

Pregunta ingenua e intempestiva: ¿saben también  los separatistas catalanes que, una vez los haya engañado, Zapatero los dejará marchar con una sonrisa?

De Extremadura a Cataluña: Linux, software libre

Dada la triste situación económica en la que se encuentra la Generalidad de Cataluña a juzgar por los lamentos de su President, José Montilla, a Pájaro bobo se le ocurre que, ahora, la Junta de Extremadura podría ayudar a la Comunidad hermana y de paso devolverle una parte del dinero (supuestamente) recibido y por recibir instalando en su red informática el sistema Linux, que ha dado a conocer el nombre de Extremadura en todo el mundo, sin necesidad de financiar cuantiosas y costosas embajadas con los Presupuestos del Estado, ya que se trata de software libre y uno, como extremeño, quiere creer que la Junta se lo instalaría con mucho gusto y sin pizca de interés. A lo sumo, a cuenta de inventario.

Pregunta ingenua e intempestiva: ¿estaría dispuesta la Junta de Extremadura a completar su programa de ayuda a la Generalidad organizando cursillos de Linux para funcionarios catalanes?

Evidentemente, de llegarse a un acuerdo entre las dos Comunidades, los cursillos se impartirían en catalán y serían gratuitos.

Juegos Olímpicos: Juegos chinos

Acaso sea obligado reconocer que, con los actos de su inauguración, los Juegos Olímpicos de Pekín han alcanzado una nueva dimensión física y estética. He ahí un arte que, aunque en cierto modo ya existía, reclama con urgencia un nombre específico. Construir, deconstruir y reconstruir o, alternativamente,  destruir inmensas formas geométricas, estáticas o cinéticas, siempre polícromas,  con figuras humanas como materia prima a la vez viva e inerte. Colosal. Los Juegos Olímpicos de Pekín son los Juegos de una comunidad con más de mil quinientos millones de piezas. Puzzle de puzzles. El arte imita a la naturaleza y diríamos que la supera.

Pregunta ingenua e intempestiva: ¿qué vendrá después de los Juegos chinos?